¿Alguna vez haz visto caer a una persona al agua por accidente?
¿Cómo se cae? ¿Vestida? ¿Con traje de baño? ¿Con zapatos? ¿Se cae de una forma organizada? ¿O bien, se cae como por descuido, sin forma, de espalda, de cabeza, etc.?
Pues bien, viendo estas situaciones, a los educadores acuáticos se nos ha ocurrido que dentro de nuestro programa educativo debemos incluir las clases con ropa.
Éstas son una sesión cada seis meses, donde los alumnos de 2.5 años en adelante vienen con su traje de baño y encima una ropa ligera en caso de bebés y principiantes.
En el caso de alumnos avanzados, ellos traen ropa más pesada como pantalones de mezclilla.
Se presentan con calcetines pero sin zapatos, sin gorra y sin goggles. Los zapatos no los metemos por asuntos de higiene, aunque la realidad es que cuando hay un accidente los zapatos también van al agua.
Durante la clase, el niño recibe todo tipo de instrucciones acerca de lo que sucedería si cayera al agua con ropa, y se le enseña qué hacer en estos casos.
Hay ensayos de diferentes tipos de caídas, y en el caso de los mayores, entrenan con la ropa pesada puesta, lo que hace que la clase sea más pesada que de costumbre.
Al final, se quitan la ropa y la sacan del fondo, esto es de lo más divertido.
Los niños se divierten y aprenden qué hacer en el caso de que caigan a una alberca con ropa, lo cual es muy común en fiestas donde hay alberca. Los niños se dan cuenta de que saben nadar aunque tengan la ropa puesta. Se dan cuenta de que aunque la ropa se pega al cuerpo y pesa, ellos son capaces de nadar con todo esto. Porque en verdad lo saben.
Pero, ¿qué pasa cuando alguien cae con ropa y nunca antes lo había hecho? ¿Cuando nunca había sentido el peso y el lastre de traer ropa mojada? ¡Te imaginas! Mejor no te lo imagines, ¡y trae a tus hijos a nadar con ropa en Acuatics!