Si el agua es benéfica para los niños, ¡es maravillosa para los adultos!

Mientras más grande de edad es una persona, más beneficios obtiene del ejercicio acuático.

Y es que mientras más nos acercamos a los 60 años, menos actividad física hacemos, o más bien, se van reduciendo nuestras opciones de actividad física. 

Las rodillas duelen, hay enfermedades articulares que no nos permiten movernos como antes, podemos tener algún problema con nuestro corazón, riñones, y lo que es peor, la depresión puede aparecer en nuestra vida.

La masa muscular tiende a reducirse y entonces ya no tenemos la fuerza de antes. 

Pero, hay una buena noticia: El agua es nuestra alternativa. Y una alternativa no solo posible, también efectiva y divertida.

Estos son algunos de los beneficios que el agua aporta a los adultos mayores:

• La posibilidad de realizar ejercicios sin impactos, el gran desarrollo aeróbico y la implicación de todos los grandes grupos musculares. También aporta seguridad y facilidad para personas que por distintos motivos no pueden practicar otros deportes.

• Permite obtener beneficios en la salud tanto física como psicológica, tan importante una como la otra, pues cuando estamos mal de salud, puede llegar la depresión.

• Los programas de educación acuática ayudan a mejorar problemas de salud, y los médicos recomiendan practicar este deporte como una terapia alternativa para enfermedades como el asma, hernias discales, molestias articulares o musculares. Estos ejercicios pueden también corregir y prevenir problemas de la columna que son constantes en el adulto mayor. 

La natación también genera beneficios en diferentes partes del cuerpo humano como:

Sistema cardiovascular: Reduce la tensión arterial mejorando el funcionamiento del corazón.

Sistema respiratorio: Aumenta la capacidad pulmonar y limpia los pulmones.

Sistema músculo-esquelético: Ejercita las articulaciones aumentando la flexibilidad y el movimiento, incrementando el grosor de los músculos y los huesos, logrando que se vuelvan más fuertes y resistentes a lesiones.

La natación es usada hoy en día como una herramienta para el tratamiento de malestares o dolencias en el adulto mayor, y también en jóvenes que han sufrido algún tipo de lesión articular o muscular, o que presenten algún retraso en el desarrollo, ya que los beneficios de la natación se extienden a los diferentes sistemas del cuerpo humano. (Calero, C., & Manuel, J., 2016)