Todos los días nos lavamos las manos unas 10 veces cuando menos. Y es que es una de las reglas de prevención contra las enfermedades contagiosas. 

Ahora que estamos todos en nuestra casa debido al tema de COVID-19, ¿realmente valoramos el valor de tener agua corriente en nuestras llaves? 

La bendición de abrir un grifo y que salga de arriba de nuestra cabeza este maravilloso líquido que, aparte de limpiarnos, nos relaja, nos acaricia, nos llena de vida. Porque quién no, después de un buen baño, ha regresado a la vida, ha tenido un mejor día, se ha quitado no sé que tantos pesos de encima, además de la mugre. ¡Ya lo creo!

Pero veamos qué pasaría si no tuviéramos este gran regalo que es el agua corriente:

Tendríamos que ir por ella en cubetas hasta el pozo más cercano, y ¿dónde queda el pozo más cercano?

Tendríamos que cargarla sobre nuestros hombros, o en una carretilla, en nuestra camioneta el que la tiene, pero, ¿y quién la sube a la camioneta? Con trabajos subimos el garrafón del agua a su sitio cuando se acaba. 

El 13% de la población mundial no tiene agua potable en su casa. 

¿Y el agua para beber? 

¿Te has dado cuenta que el agua que sale del grifo de tu cocina es potable, aunque no esté 100% libre de microorganismos? Tú la puedes purificar con tan solo filtrarla o hervirla. 

¿Haz valorado la maravilla y las ventajas que esto conlleva? 

Todavía el siglo pasado mucha gente tenía que hervir toda el agua que consumía, todos los días.

En la actualidad, hay países en los que el agua de los pozos está contaminada, o que toman el agua de ríos o manantiales que están contaminados. Si ese fuera nuestro caso, ¿cómo le haríamos ahora que debemos lavarnos las manos 10 o más veces al día? ¿Se te ocurre algo?

Por ello te invitamos a valorar el agua, a cuidarla si la tienes al alcance de una llave o al alcance de un garrafón. 

Te invitamos a darte una ducha rápida todos los días, a cerrar la llave mientras te enjabonas las manos, el cuerpo o los dientes. 

Te invitamos a usar el agua con mucho cuidado, si no, solo imagínate esta contingencia sin agua.

Dicen que la próxima guerra entre países será por agua. Esperemos que no llegue, de nosotros depende que así sea.